Vivimos en una era de transformaciones tecnológicas y revoluciones digitales que avanzan a pasos agigantados, donde usuarios demandan a su vez más y mejores soluciones en tecnologías para su aprovechamiento desde un nivel personal hasta uno organizacional y global.
Uno de estos grandes cambios, llegó de la mano de proveedores dispuestos a satisfacer las necesidades de sus clientes y que ellos en algún momento tenían. De modo que el problema de una empresa terminó siendo un mercado global para satisfacer a miles de usuarios.
¿De qué hablamos en concreto?
De la Infraestructura como Servicio (IaaS), claro está, la cual nace de algunos pioneros pero gigantes de la industria, al notar que entre más crecían más recursos informáticos requerían y con ello, todo una cadena de inversiones que muchas veces no terminaban aprovechando.
¿La solución? Cedieron los recursos de sus centros de datos en todo el mundo y liberaron de la compleja tarea de aprovisionar sus propios centros de datos a costos muy elevados a miles de usuarios y empresas. Que por crecimiento no pueden permitirse la compra o renta de recursos tan grandes.
De esta manera es como se condensan todos estos recursos de computación, modelos e información que arcaicamente se computaba, procesaba en bases de datos y/o se hacía el almacenamiento de datos localmente o en alguna “Nube privada”.
Al abrir los recursos a miles de usuario al mismo tiempo, nace el primer modelo de nube como lo conocemos actualmente… Nube pública o Nube híbrida.
Hablar de la Nube es muy común hoy en día, pues su usabilidad tan fácil y óptima ha convertido el conocer las herramientas de desarrollo y servicios de producción basado en la nube, en habilidades necesarias e indispensables en el ámbito laboral.
Para los profesionales de TI, la formación, capacitación y certificación en lo respectivo a Computación en la nube, es ahora el conocimiento que permea en las principales actividades dentro de las empresas.
Google Cloud Platform (GCP) surge como proveedor de la nube y como una de las soluciones más prácticas y seguras, para las pequeñas, medianas y grandes organizaciones. Ayuda a procesar, almacenar y gestionar grandes volúmenes de datos de manera económica y confiable, sin la necesidad de administrar ni aprovisionar infraestructura, espacios físicos, instalaciones o personal para mantener los centros de datos.
GCP tiene algunas ventajas en comparación con modelos tradicionales, como el uso de servicios bajo demanda (On-Demand) y que se factura por lo que se utilice (Pay-As-You-Go).
Es decir, puedes disponer de los recursos más sencillos como máquinas virtuales con sistemas operativos hasta el uso de aplicaciones de aprendizaje automático para tu aplicación empresarial en cualquier momento, con cualquier capacidad, y cancelarlos cuando dejes de utilizarlos.
Además ofrece la oportunidad de aprovechar las grandes capacidades de cómputo de Google y su infraestructura global (Disponible en más de 200 países y territorios, 21 regiones y 64 zonas).
Concede el respaldo y seguridad de un coloso de la tecnología, pues nuestros datos, información y proyectos estarán resguardados en sus centros de datos aprovisionando los recursos necesarios para su tratamiento.
Disponiendo de uno de sus tantos servicios (de cómputo, almacenamiento, Big Data, IoT, seguridad, entre otros) que nos otorgue soluciones adaptables y de alcances ilimitados para satisfacer las demandas organizacionales de manera detallada.
Todos estos servicios responden en mucha medida a diferentes modelos, que aún para facilitar más su uso pueden desplegarse según la necesidad e interés de cada usuario.
GCP ofrece servicios en modelos de Infraestructura como Servicio (IaaS), Plataforma como Servicio (PaaS) y Software como Servicio (SaaS), que se diferencian por la capacidad de configuración de los servicios en la nube, en mayor o menor medida, según el usuario desee o no preocuparse por la administración.
Iniciando con Google Cloud Platform
Al hablar de GCP entendemos que todo aquello que se realice dentro de su Nube (Creación de máquinas virtuales / Compute Engine, herramientas de gestión de contenedores, entre otros) pertenecerá a un “Proyecto”, pues cada recurso se utiliza de manera jerárquica, siendo los proyectos el primer nivel.
Crear un Proyecto en GCP, nos permite asociar los recursos necesarios para desarrollar y ejecutar aplicaciones, sitios web y servicios que nos otorguen las soluciones esperadas.
Comenzar a conocer los beneficios de Google Cloud Platform es tan fácil como ingresar a la consola de administración de GCP y acceder proporcionando:
- Una cuenta de Gmail o G Suite.
- Y una tarjeta de crédito (A la cual no se le realizará ningún cargo y sólo se utilizará para comprobar que no se trate de un robot).
Al registrarte, GCP te otorgará un crédito gratuito de 300 USD durante 12 meses para probar todos los productos de su Nube. Experimenta, aprende y haz crecer tus proyectos.
