Aprendizaje basado en proyectos (PBL)

¿Qué es el Aprendizaje Basado en Proyectos (PBL)?

El Aprendizaje Basado en Proyectos (PBL, por sus siglas en inglés), es un método de enseñanza-aprendizaje en el que los estudiantes tienen la tarea de realizar un proyecto, en un tiempo determinado, para resolver un problema específico o abordar una tarea mediante la planificación, diseño y realización de una serie de actividades, a partir de la aplicación de los aprendizajes adquiridos y con el uso efectivo de los recursos proporcionados.

Es decir, que es un sistema en el que se premia la acción, en este caso, llevar a la práctica los conocimientos adquiridos en el aula con el objetivo de dar solución a una problemática real.

¿De dónde viene el PBL?

Este sistema es parte de un conjunto de metodologías activas que nacen como respuesta al tipo de enseñanza clásico en donde el profesor, que es el “único poseedor del conocimiento”, lo deposita en el alumno, quien lo recibe de forma pasiva sin lugar al cuestionamiento.

En los sistemas activos, por el contrario, el proceso de enseñanza se basa en el alumno y el aprendizaje es un resultado directo y natural de la acción.

Estos sistemas promueven roles activos en donde los alumnos aprenden haciendo.

Con esto en mente, el PBL es un gran método de aprendizaje pues se convierte en un puente que permite a los estudiantes poder visualizar una problemática desde una perspectiva más completa y resolverlo involucrando sus conocimientos, previos o nuevos, frente a determinada área y en un plano real.

Un sistema crítico

En pocas palabras, el Aprendizaje Basado en Proyectos no es otra cosa que un sistema crítico que sitúa al estudiante en el centro de la experiencia de aprendizaje y que le permite desarrollar el pensamiento crítico, las habilidades para trabajar colaborativamente y la competencia comunicativa a través de proyectos que tienen cabida en el mundo real.

Es decir, que para poder alcanzar los resultados esperados, los estudiantes parten de un problema o situación concreta, entran en procesos metacognitivos, es decir, hacen conciencia de que están aprendiendo y, como resultado, aumentan sus capacidades creativas… todo esto para dar solución a una problemática real.

La lógica detrás de este tipo de enseñanza es dotar a los estudiantes de las herramientas cognitivas necesarias para plantearse problemáticas de su entorno o que afectan a su vida diaria y la posibilidad de actuar frente a ellas, es decir, que los proyectos se conviertan en catalizadores de la motivación.

Desarrollo de proyectos PBL

¿Y cómo es un proyecto PBL? La verdad es que no es muy diferente de otro tipo de proyectos académicos o laborales en los que se plantea una hipótesis para la resolución de un problema específico y se reúnen los recursos necesarios para intentar corroborar nuestro planteamiento y así alcanzar una solución.

Para lograrlo, lo ideal es hacer uso de diferentes herramientas como la colaboración, trabajo en equipo, comunicación efectiva, planificación, investigación, capacidad de abstracción y síntesis y mucha, mucha perseverancia.

Un proyecto PBL puede partir de una cronología similar a esta:

• Planteamiento del problema. Identificar y delimitar una situación o necesidad particular. Este es el detonante de todo el proyecto y motiva la acción.
• Investigación. Definir los alcances de nuestro proyecto. Leer, seleccionar, filtrar y abstraer la información para poder hacer una propuesta de soluciones.
• Diseño del prototipo. Elegir la solución más adecuada de entre todas las propuestas. Determinar qué recursos serán necesarios para llevarla a cabo y establecer la planificación y distribución de tareas para su ejecución.
• Desarrollo del prototipo. Ejecutar el plan de acción planificado. Realizar, en tiempo y forma, todas las tareas sugeridas.
• Implementación. Puesta en marcha del proyecto. Aquí es cuando se llevarán a cabo las acciones concretas del plan y se entregarán los informes de toda la investigación.
• Evaluación. El momento de analizar los resultados. Se hace de forma constante a lo largo de todo el proyecto y toma en cuenta los indicadores de investigación y calidad definidos al inicio. Al finalizar, hay un reporte de resultados general.

Bajo el sistema PBL existen varias corrientes diferentes, una de ellas es la metodología Lean Startup que se utiliza para la creación de productos y se enfoca en reducir los ciclos de desarrollo a través de la suma continua de experimentación, lanzamientos y aprendizaje.

Esta metodología ayuda a los programas educativos a dar resultados certeros en periodos de tiempo más cortos, por lo tanto, el alcance e impacto estará bajo la responsabilidad y capacidad de cada estudiante.

De esta metodología se puede rescatar el siguiente esquema, que nos ayuda a comprender mejor el proceso de aprendizaje y desarrollo de los estudiantes:

De acuerdo con el esquema anterior, el ciclo del Aprendizaje basado en Proyectos es un constante flujo entre la generación de ideas, el planteamiento de soluciones, la práctica, la medición de resultados y el aprendizaje derivado.

Después del proyecto

Si el proyecto se lleva a cabo siguiendo alguna de estas metodologías, al finalizar el proceso, los alumnos habrán adquirido conocimientos y habilidades útiles para su futuro personal o profesional.

Esta resolución, por lo general, se hace luego de realizar una comprobación de la utilidad o significación mediata de sus aprendizajes. ¿Y cómo es esto? Llevando los proyectos a la vida cotidiana y probando su relevancia en el mundo real.

En conclusión, el PBL es una metodología certera que busca generar experiencias más significativas y críticas en los estudiantes.

En Bootcamp Institute trabajamos con sistemas que le permitan a nuestros alumnos explorar sus propios caminos a través de la práctica diaria y con la convicción de que el desarrollo óptimo de proyectos educativos será el camino hacia una vida profesional crítica y autodirigida.

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